Miguel Jáimez
Asesor laboral.
La sexta Ola
Cuando todos creíamos que se estaba acabando esta pandemia, de repente sale en los medios una nueva variante en Sudáfrica que se llama Ómicron, o algo por el estilo, que solo su nombre parece sacado de una película o serie de las actuales de cincuenta mil giros, que no presagiaba nada bueno, que al día siguiente estaba ya en España y a los cinco días se infectaba más rápido que cualquier versión anterior. Está golpeando rápido y no se detiene, baja pero sigue estando ahí.
Menos mal que nos ha pillado vacunados a la mayoría, ¿Cómo sería el tema sin vacunas? No quiero ni imaginármelo con lo cansados que están nuestros sanitarios y con la cantidad de casos. Las bajas por enfermedad se han multiplicado más que en cualquiera de los anteriores repuntes.
Hemos normalizado la situación y es bueno para muchos aspectos de la vida, pero debemos tener claro que todavía provoca muchas hospitalizaciones y muertes. Aunque es verdad que debemos afrontarlo con esperanza porque la ciencia funciona, y funciona bien. Nos tiene que servir como ejemplo de que la inversión en ciencia es el camino para avanzar y mejorar nuestras vidas en todos los campos, ya no solo de la medicina, sino del trabajo, de los aspectos sociales y económicos.
No suelo estar tan al día de todos los datos como al principio pero ahora me doy cuenta de que ante esta tragedia mundial, nuestro país ha liderado en muchas ocasiones los datos de vacunación, de protección en las residencias, de que nuestro ejército ha estado al frente de todas las situaciones de riesgo afrontándolas de primera mano, que a nuestros sanitarios los demandan en cualquier parte del mundo, que tenemos grandes científicos trabajando en sacar vacunas y tratamientos en las mejores industrias farmacéuticas del mundo, que hemos sido un ejemplo en la protección de nuestras empresas y trabajadores, que somos un país con nuestros defectos pero también con muchas virtudes y se ha creado empleo por encima de los datos anteriores a la pandemia con más de veinte millones de empleados y records en afiliación.
De esta pandemia lo mismo no hemos salido mejores, pero sí hemos dado un ejemplo al mundo de que España es un país donde sus gentes saben trabajar, luchar y competir con cualquier país del mundo y que si nos lo proponemos podemos estar a la vanguardia en muchos campos en la economía, en medicina, en las energías alternativas, en el turismo o en la ciencia. Solo hay que saber apostar por nosotros y poner todos nuestros recursos y conocimientos en hacer las cosas de forma efectiva.