La columna semanal de Miguel Jáimez – Vacunas, ¿sí o no?

Desde que llegaron las vacunas, hubo una esperanza para poder salir de esta pandemia con muchas más probabilidades de que no se produzca una infección muy grave que nos lleve al hospital a debatirnos entre la vida y la muerte.

Nuestro sistema sanitario, durante ya casi dos años, está soportando un estrés por la situación pandémica sobre todo por las numerosas olas de contagio acontecidas y por parte de los centros públicos. La vacunación se ha demostrado con datos estadísticos que es eficaz ante la enfermedad y es la mejor forma de parar los ingresos hospitalarios y los ingresos en UCI.

Todas estas afirmaciones anteriores son hechos demostrables no son opiniones o alteraciones de datos, ni noticias falsas son resultados empíricos.

Entonces, la mejor forma de no morir, de no saturar los hospitales, de evitar enfermedades graves, es la vacunación. Hasta ahí creo que todos estamos de acuerdo.

Ahora, si todavía niegas que hay una pandemia, por tanto, no crees que esto sirva para nada. Si piensas que sí existe una pandemia, pero crees que tu libertad personal está por encima de la enfermedad y muerte de los demás porque ahora se está viendo que los casos que llegan a UCI son en un 80 % no vacunados, ¿Dónde queda la parte de responsabilidad ciudadana con los demás? El egoísmo de éstos y que sean los que ponen en serio peligro una atención adecuada y los que con su actitud insolidaria ponen ante las cuerdas nuestro sistema sanitario.

Todo esto lleva a unos graves perjuicios ya no sólo sanitarios, sino económicos, por los recursos dedicados extras a la sanidad, a la educación, los problemas para las empresas por las bajas de enfermedad de trabajadores.

Por tanto, esas personas al no vacunarse no solo deciden sobre su salud y bienestar, sino que están afectando a la salud de todos y a la vida de todos., de tal modo que en este caso, la libertad de unos se convierte en el perjuicio de todos. ¿Debemos aceptar esa libertad o por el contrario se deberían aplicar medidas coercitivas para estas personas?

Creo que no se debería obligar a vacunar, pero sí que esas personas que no se vacunan tuvieran prohibido todo acto público que lleve al contacto con otras personas.