Borja Martínez Ferrero / agosto 2022
Manuel Gavira volverá a ser la cara visible de Vox en el Parlamento andaluz, como ya lo fue en la pasada legislatura. Una decisión que pone fin a la crisis interna de poder tras la marcha de Macarena Olona de la política.

Vox mueve pieza en el tablero andaluz. Tras digerir el fiasco en las elecciones de Andalucía, al no cumplir las expectativas marcadas por el partido de conseguir 20 parlamentarios, se vino la marcha de Macarena Olona de la política. Una situación que ha generado mucho ruido interno, debido a la lucha de poder para ver quién conseguía el puesto de Macarena Olona. Ante esta inestabilidad interna, Vox se ha visto obligado de manera urgente a designar la figura de la portavocía, un puesto que, finalmente, se reveló este miércoles, nombrado al diputado por Cádiz, Manuel Gavira, que volverá ser el portavoz de Vox en el Parlamento Andaluz tras su relevo en la portavocía en mayo del 2021.
Con una nota de prensa, la dirección nacional de Santiago Abascal pone fin la crisis interna que tenía abierta tras la marcha de la política de Macarena Olona por motivos de salud. Una disputa interna en la que había diferentes candidatos, Javier Cortes, que formaba parte del círculo cercano de Abascal, pero que se salda con la vuelta de Manuel Gavira, tras ser relevado en la portavocía en la XI Legislatura, puesto que ocupó después de la dimisión de Francisco Serrano, líder de Vox y candidato a la Junta de Andalucía en 2018, por presunto fraude de 2,5 millones de euros en subvenciones y Alejandro Hernández, quien golpeó un micrófono y dijo “a la porra, a tomar por culo, hombre” tras una discusión con la presidenta de la Cámara, Marta Bosquet.
También, han anunciado otros nombramientos; como portavoces adjuntos a Rodrigo Alonso, secretario general del sindicato Solidaridad, y Javier Cortes, presidente de Vox en Sevilla y, por otra parte, a la gaditana, Blanca Armario, como presidenta del Grupo Parlamento.
De esta manera, el partido de extrema derecha en Andalucía queda conformado y vuelve sobre sus pasos, tras dejar atrás la etapa de Macarena Olona en el territorio. En septiembre, cuando se reanude la actividad política, Vox encarará su nuevo curso político de irrelevancia parlamentaria y obligados a repensar la estrategia de oposición, ya que dejan de tener la influencia que gozaba en la anterior legislatura.