Miguel Jáimez
Asesor laboral.
Los impuestos
Como todo en la vida, hay unos que defienden la utilidad de éstos y otros que creen que no sirven para hacer una sociedad económicamente próspera. Son los modelos económicos de los partidos de izquierda y derecha, lo que posiblemente más diferencia a las dos corrientes de pensamiento político.
Ahora estamos en plazo del impuesto del IRPF, el impuesto que más recauda para las arcas públicas y el que grava las rentas de las personas físicas. En los modelos más liberales se piensa que los impuestos lo único que hacen es empeorar la situación económica del país o de las Comunidades Autónomas concretas sin más
Si pensamos para qué sirven los impuestos o sus utilidades, lo primero que nos encontramos en sus definiciones es que sirven para la distribución de la riqueza o de las rentas, para el pago del gasto público del estado para las distintas funciones o servicios públicos. Todos pensamos que debe haber una presión fiscal justa, ¿Pero cuál es esa imposición justa?
Pensemos en qué pagan los impuestos: pagan nuestro sistema de salud, pagan la educación pública, nuestra defensa, paga nuestra seguridad, pagan los salarios de los funcionarios, paga todas las obras públicas, paga todo el sistema de becas, paga la corona, paga todo el sistema de desempleo y así un largo etcétera.
Ahora pensemos que bajamos los impuestos y estamos por debajo del nivel óptimo de fiscalidad para hacer frente a todos estos servicios, se endeuda el estado para hacer frente a estos gastos y les dejamos esa deuda a las generaciones futuras y así podemos sufragarlos pero podemos llevar a la quiebra a la economía para esas generaciones futuras, bien quitamos servicios públicos y los pasamos al privado, entonces tendríamos que pagar sanidad, la educación o la seguridad, además de tener que pagar un plan de pensiones etcétera.
Porque el modelo liberal trata de eso, que se lo pague el que pueda, los demás que se apañen. Entonces tendríamos a la gran mayoría de la población sin sanidad, sin educación, sin seguridad, sin prestaciones, sin jubilación, pero ellos, los mejores dotados económicamente si, los demás volveríamos a estar a la expensa de la beneficencia o ir al mercado negro en sanidad con unas garantías estupendas, con precios imposibles para la mayoría.
En una sociedad, si no avanzamos todos y no tenemos cubiertas nuestras necesidades vitales, educativas, sanitarias básicas, seremos una sociedad pobre, sin posibilidades de progreso, de avance, de bienestar para todos. Los impuestos, aunque incómodos, son necesarios. Lo que se debe conseguir es que todo el mundo pague para que los niveles impositivos bajen, si unos pagamos y otros no, es donde está la injusticia y no en el hecho de paga