
José María Martín
Trovador en la Última Frontera
Los años perdidos
Era un cuatro de Diciembre,
un pueblo se echó a la calle,
a pedir su autonomía,
pa dirigir su destino,
pero había quien no quería.
A pesar de los del «No»,
que no querían perder privilegios
defendimos nuestra tierra,
luchando lo conseguimos,
y tomamos nuestra rienda.
Nos pusimos a trabajar,
los tópicos no nos valían,
empezamos a construir
carreteras que nos unieran,
y no fuesen pa Madrid.
Que en Ayamonte nacían,
a Puebla de Don Fabrique
iban, vertebrando Andalucía,
más de quinientos cincuenta
kilómetros que se hacían.
Lanzamos la educación,
que era nuestro porvenir.
Construimos sanidad,
de las mejores del mundo,
otrora se oía hablar.
Relanzamos la cultura,
el flamenco, la escritura,
los espacios naturales,
todos nuestros monumentos,
del tejado a los cimientos.
Defendimos nuestra habla,
denostada y ridiculizada,
siempre había algún capullo.
Pero hoy hablar andaluz,
es un motivo de orgullo.
Ofrecimos y compartimos,
marismas, nieves, y plazas
olivares, mar, montañas,
bosques, desiertos y playas.
Y a pesar de los pesares,
fuimos sacando cabeza.
Y en Andalucía ha pasao,
que ningún pueblo de aquí,
se haya quedao despoblao.
Como en las dos Castillas,
en Aragón o en Navarra,
en Cataluña, o Madrid,
en Galicia o en Cantabria.
No podemos confiarnos,
hay que tratar el problema,
tendremos que estar al loro,
más trabajo, e inventiva,
coger los cuernos al toro
Y es que un día los andaluces,
quisieron probar el cambio,
y a los del «No»,
a pesar de que, no ganaron,
se juntaron, y gobernaron.
Y ya lo estamos probando,
y lo estamos padeciendo.
Aunque no desesperemos,
aprender de la experiencia,
que pronto cambiar podremos.
Perdemos en educación,
la sanidad poco a poco
la quieren privatizar,
y ahora, tiene “cohones”,
perdemos las subvenciones.
Menos obras y servicios
y ayudas a la pandemia,
también población perdemos,
de renovables no entienden,
ni la cultura defienden.
¡Eran tan buenos gestores!,
Pues ya podemos comparar,
estos son de los peores,
solo buscan en rio revuelto,
ganancia de pescadores.
Si aprendemos no está mal,
nos jugamos mucho en ello,
ya perdemos cuatro años,
a ver si nos espabilamos,
y no compramos engaños.
Como,
don Quijote a su escudero.
decía mi amigo Guillermo
al bueno de su sobrino,
una bacía de barbero,
era yelmo de Mambrino.
No quisiera despedirme,
sin dejar aquí una estrofa,
a quien, un cuatro Diciembre,
lloro toda Andalucía,
desde Huelva hasta Almería.
Quién por colgar su bandera,
un vil disparo mató,
Solo dieciocho años tenía,
Manuel José García Caparros
Un héroe de Andalucía.
Va por Ti.