Estas asociaciones afirman que los familiares no pueden volver a sus casas porque “les han tapiado las puertas”. Sobre que la Guardia Civil encontrase 250 plantas de marihuana no han hecho declaraciones.
El hermano del acusado del crimen, atendiendo a los medios de comunicación en Loja
La Plataforma Nacional Derechos Humanos, la Congregación Religiosa Católica Fe y Esperanza y la Unión Esperanza Gitana por la Humanidad han entregado este martes un manifiesto en la Subdelegación de Gobierno para denunciar el racismo existente en Íllora contra la familia del detenido, que se encuentra fuera del pueblo por miedo a represalias tras haber sido destrozadas cinco de sus viviendas.
Este manifiesto defiende una convivencia pacífica entre las dos culturas y “parar a los racistas y al racismo”, condenando los episodios violentos vividos en el municipio del Poniente, tras la concentración pacífica del lunes. Hechos por los cuales la Guardia Civil ha abierto una investigación.
Estas asociaciones afirman que le han tapiado las entradas de las viviendas a los familiares del acusado, que se encuentra actualmente en prisión. Según informa EuropaPress, los periodistas le preguntaron sobre la investigación de la plantación de marihuana descubierta en una de las viviendas, un hecho que han afirmado “desconocer”.
Estos familiares han declarado que están viviendo en un pueblo cercano “donde querían lincharlos también”. Este medio no tiene constancia sobre ninguna agresión en ningún pueblo del Poniente Granadino contra los familiares del detenido.
Estas asociaciones se han reafirmado en la versión de la familia del presunto homicida, señalando que la muerte de Juan “fue un accidente” producto de “una riña entre jóvenes” y califican la muerte de Juan como “una fatalidad”.
La subdelegada del Gobierno en Granada, ha afirmado desconocer que las viviendas hayan sido tapiadas y ha señalado que se están siguiendo los cauces legales correspondientes con la familia del agresor.